MURIO EL AMANECER
Noche de cuatro lunas y un solo árbol, con una sola sombra y un solo pájaro.
Busco en mi carne las huellas de tus labios. El manantial besa al viento sin tocarlo.
Llevo el No que me diste, en la palma de la mano, como un limón de cera casi blanco.
Noche de cuatro lunas y un solo árbol, En la punta de una aguja, está mi amor ¡girando!
Federico Garcia Lorca
saludos de tu amiga
|