Niña de los ojos tristes
y mirada tan esquiva,
te he tomado entre mis brazos,
y hoy te llevo por la vida.
Tocarás las nubes,
que del cielo bajan tan de prisa
rodeandote entusiasmadas,
pués vienen a darte risas.
Las majestuosas aves
traspasarán tus pupilas,
para que siempre recuerdes
Cúan valiosa es la vida...
Coloridas flores
de esas que crecen
en cualquier lugar,
entre piedras y entre espinas
para tí se abrirán.
Tantos cielos he de darte
que jamás has de dudar
si es mejor encerrarte
o salir a disfrutar.
Niña que pequeña y triste
tus días viste pasar,
sonríe que jamás la vida
te volverá a golpear.
Niña que atesoro en mi alma,
tú ,has forjado sin saber,
desde tu dulce inocencia
a esta fuerte mujer.
Ya nunca llores mi niña,
no volverás a perder,
que por tí y por mí ,pequeña,
es que me sé defender...