Se encontraron una noche
el engaño y la traición
y se hicieron de palabras
defendiendo el gran honor
de haber herido más almas
con la daga del dolor.
"-Mira traición yo te gano-"
dijo el engaño con fuerza,
"-Yo soy quien acaba amores
dejo malos sinsabores
y ensucio toda pureza,
voy regando negras flores a los amantes y amores que conmigo se tropiezan, visto lujuria y deseo para conquistar las almas.
y cuando ya las poseo
nada les vuelve la calma-".
"-Mira engaño no compares-"
contesto la traición segura
"-Tu eres río, yo soy mares mis aguas la sepultura, yo soy quien brinda el saludo el beso de los buenos días palmaditas en la espalda consejos, buenas palabras
siempre digo-en mí confía!-
para después por la espalda dar certera cuchillada y así destrozar la vida-"
Y seguían furibundos
engaño y traición peleando cuando vieron pasar llorando
a una linda niña en flor pregúntale la traición
"-Verdad que soy la culpable de tu fuerte y gran dolor-?"
"-No !le dijo el engaño,
"-Di que culpable soy yo-"
El joven paró y les dijo:
"-No es ninguno de los dos, este dolor tan inmenso, que me está rompiendo el pecho me lo ha causado el amor-".
( desconozco al autor )