Se me olvidó hasta el año en que vivía se me paró el reloj que yo tenía, de pronto desperté los días no existían creí que estaba despierta y estaba dormída, un sueño de colores con beso apasionado en mi mejilla. Con un roce de mano y una sonrisa una mirada alegre y desenfadada, mi sueño parecía un cuento de hadas. Me escribías en el aire que me querías, me encontré perdida, me vi obligada a escribirte en el aire cuanto te amaba. Seguía confundida seguía abrazada como los angelitos a mi almohada, seguía despierta seguía soñando que me estabas a mi contemplando, sentía la lluvia sentía los rayos mi corazón latía desesperado. Tocó el reloj eran las cinco me di un susto de muerte me puse en marcha, se acabaron los sueños dejé mi cama tan calentita con mi almohada, ¡el agua fría! puse el café cerré mi puerta y eché a correr, por el camino reía y lloraba el autobús se me escapaba, subí la última desanimada se había difuminado el cuento de hadas, llegué a la empresa y me cambié cogí la ficha y la marqué, tocó el timbre y eché a correr. Llegué a mi puesto empecé a trabajar como una loca hasta plegar, llegué a mi casa me puse a descansar CERRÉ LOS OJOS Y VOLVÍ A SOÑAR...