Una rosa es una flor,
una flor es una lágrima,
una lágrima es el dolor,
escrito en cada palabra.
Un murmullo es la voz
la voz es la distancia,
que existe en un corazón,
que siente que tiene alma.
Un paso he dejado de andar,
y encuentro que cada mañana,
se hace mas extenso el sol,
que mi sombra se alarga.
He dejado de ser yo,
parte hielo parte llama,
conjugación de un solo verbo,
arrancado a la madrugada.
Tiempo tengo para viajar,
volando y sin alas,
hacia un futuro que deja,
libertad en mis entrañas.
Desde el principio del horizonte,
hasta el final del alba,
allí resido yo en silencio,
sintiendo que me amas.