LA AUTOESTIMA
Estos sentimientos, son el reflejo de que tan a gusto te encuentras contigo mismo, lo cual está basado en todos los pensamientos, sensaciones y experiencias recogidas durante tu vida, estos se manifiestan en sentimientos positivos o negativos, dando como resultado la autoestima.
El tener una autoestima saludable, es fundamental, puesto que a través de este sentimiento de aceptación somos felices, es importante tener una buena imagen de nosotros mismos, amarnos y aceptar nuestro cuerpo, dejar de compararnos y agradecer lo que tenemos.
Parte importante de la autoestima es la percepción de nosotros mismos sin importar las opiniones externas, es el reconocer nuestros talentos, habilidades y valores, es aprender a escucharnos e identificar nuestras propias necesidades, es saber qué nos gusta, qué queremos en la vida, qué nos hace feliz.
También el nivel de cuidado, que ponemos en nuestra salud, es de suma importancia, realizar ejercicio de forma continua, alimentar nuestro cuerpo de afecto, saber disfrutar y divertirnos, descansar el tiempo necesario, tener una alimentación sana y balanceada, en conjunto el adquirir buenos hábitos, nos ayuda a mejorar.
Así, para el fortalecimiento de la autoestima necesitamos sentirnos dignos de éxito y felicidad, tener una fuerte percepción acerca de lograr éxito, respeto, amistad y amor, dejar de criticarnos y solo reconocernos a nosotros y a los demás nos dará excelentes resultados.
Otro elemento importante para nuestra autoestima, es la confianza que tenemos de alcanzar nuestras metas exitosamente, el saber que nuestra conducta está regulada por nosotros mismos, tomando la responsabilidad de nuestras acciones, es tiempo de que eliminemos la frase “no soy capaz”, puesto que cada vez que la repetimos confirmamos inseguridad y las consecuencias psicológicas son tan contraproducentes como cuando te lo dicen otras personas, es hora de que empecemos a decir “si me lo propongo, ¡soy capaz!”.
Por último, lograr adquirir la noción de nuestro yo, de nuestras cualidades y características, el conocernos a nosotros mismos supone la madurez de identificar cualidades y defectos, apoyándonos en los primeros y luchando contra los segundos.
Nuestro peor enemigo es ir a la deriva, sentir que no vamos a ningún lado nos detiene, en cambio sentir que nos dirigimos a alguna parte, que tenemos un propósito nos llena de energía.
Trabajar diariamente en nuestra autoestima nos ayuda a sentirnos maravillosamente bien la mayor parte del tiempo, ayuda a que nuestra personalidad emerja naturalmente, ahora es tiempo de aceptarnos y querernos tal y como somos.
Por Lic. Janet Delgado González