Me acerco lentamente a tu mirada entre los mágicos senderos del silencio navegando en las líneas musicales con el canto de las gaviotas.
Yo me sumerjo en tus palabras entre el linaje de tus versos, para cubrirme con los reflejos de tus ansias y abrazarme con fuerza a tus esperanzas.
Busco bajo ese manto de la noche un refugio para encontrarte cuando se visten de sombras tus regiones y agonizan mis atardeceres...
Me pierdo en los pliegues del tiempo sobre los senderos de la distancia, me embriaga la ternura de tus caricias y el perfume de la pasión de tu alma.
Anhelo en las constelaciones lejanas que adornan el horizonte que nos une, ese lugar soñado bajo el universo como eterna morada para amarnos.
Formé con mis manos un paraíso para encontrarte cada día en mi espacio, y despertar entre tus brazos con el alba y postergar esos instantes en el recuerdo.
Mis pensamientos para ti siempre rubricados con los suspiros de mi pecho estremecida de inquietud y melancolías para rescatar tus huellas del camino...
Yo te busco en los remolinos de los mares que guardan los deseos de tu alma, las ilusiones tatuadas en mi piel y la vereda interminable de tus besos.