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¡Adiós, adiós tristeza!
He de decirte:¡Adiós!
No permitiré que me sigas atormentando
ni mis fuerzas minando...
Gracias por estar conmigo,
pues junto a tu amigo DOLOR,
me hicieron sufrir, llorar
abandonar mi destino...
Me hicieron sentir debilidad,
sobretodo afrontarla y superarla,
lave mis heridas con el llanto vertido
y asi por fin curarlas...
Serás bien recibida, si por instantes
decides a mi lado regresar,
para recordarme mi vulnerabilidad
y no olvidar la humildad...
Pero si te advierto: ¡Tristeza!
¡Jamás tus amigos y compañeros
la apatía y desesperanza
las dejaré a mi vida entrar!...
Pues me llevaron a la profundidad
más oscura del fracaso y depresión...
Por eso...¡A mi vida jamás....
volveran a llegar!
¡Adiós para siempre APATIA
y DEPRESION!
¡No me verán más vencida
y a punto de renunciar!...
Y cuando la vida o el destino
te pongan de frente conmigo
con orgullo te digo, Tristeza,
que tendré mas valor y entereza,
¡Jamás me verás vencida!
Aracely Casas V.
Julio 1, 2006
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