Las mujeres que estén en edad de merecer tienen que repetir esta plegaria todas las noches…
San Antonio, encuéntrame novio. San Maroto como el de la foto. San Eleazar que me saque a pasear. San Gabriel, que me sea fiel. San Alejo, que no sea pendejo. San Hilario, que me dé todo el salario. San Crispín, que no sea un “rapidín”. San Erasmo, que me lleve hasta el orgasmo. Santo Tomás, por delante y por detrás. Santa Carlota, que la tenga bien grandota. Y San Matías, que me lo haga todos los días. Así sea. Amén |