Cuentan que un sabio extendió una viga de madera sobre el piso,
y les dijo a sus alumnos que debían atravesarla sin tocar el suelo.
Todos lo lograron fácilmente y hasta repitieron jugando.
Esa noche les advirtió que al día siguiente, esa misma viga sería colocada encima de un estanque,
en cuya agua vertería un ácido muy fuerte que quemaba la piel, de tal forma que quién cayera
al agua sufriría quemaduras...
Esa noche los alumnos no durmieron pensando en la peligrosa prueba.
Llegada la hora matutina, el sabio les dijo que debían atravesar el estanque,
caminando sobre la viga.
Temblando e inseguros, comenzaron a cruzar y la mayoría cayó al estanque con ácido.
De inmediato los sacaron y éstos comenzaron a sentir ardores y algunos les salieron sarpullidos.
El sabio no les dejó sufrir mucho y sonriendo les dijo: la piscina carece de ácidos,
solamente le eché tinta verde....
Esta pequeña historia nos muestra que el miedo hace estragos en el organismo y en nuestras vidas...
Por eso la importancia de eliminar de nuestro interior, miedos, creencias limitantes y bloqueos.
Nos debemos de llenar de una confianza absoluta, libre de cualquier duda,
nuestro estado de ánimo y nuestra actitud son importantes ante cualquier reto,
ante cualquier experiencia...