Como silbar con la lengua

Silbar puede parecer simple, pero necesita un montón de práctica conseguir posicionar la lengua a la perfección.

Sigue estas instrucciones para silbar con la lengua.

Amplia tu lengua, de modo que se apoya en los molares superiores a ambos lados de la boca, creando un pasaje de aire a lo largo del techo de la boca. Asegúrate de no permitir que el aire se escape por los lados. Al forzar al aire a viajar a través de este canal, serás capaz de producir un silbido agudo en lugar de ruidos entrecortados.

Coloca la lengua cerca del techo de la boca alejando la punta de los dientes delanteros. Esto engorda la lengua, reduciendo el canal de aire a lo largo del paladar, al mismo tiempo que creas un espacio más amplio en la parte delantera de la boca a través del cual se empuja el aire.

El posicionamiento es crucial. Para producir un silbido, debes forzar al aire a hacer una curva cerrada, que en este caso se crea mediante tus dientes frontales y la lengua. Forzar el aire a ir a lo largo del paladar hace que esta curva sea aún mayor.

Frunce los labios con firmeza, presionando contra los dientes. Esto refuerza la curva cerrada en el conducto de aire producido por los dientes del frente.

Resiste el impulso de hacer sobresalir los labios hacia fuera, lo que producirá un sonido entrecortado.

Expulsa el aire de tu boca lentamente, experimentando con la posición de la lengua. Aunque deseas que el paso del aire a lo largo del paladar sea estrecho, muy poco espacio produce un sonido demasiado jadeante. Del mismo modo, debes trabajar para encontrar la distancia ideal entre la parte delantera de la lengua y los dientes. Una vez que encuentras un equilibrio entre estos dos, serás capaz de mover la lengua hacia adelante y hacia atrás en la boca para producir diferentes tonos.

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