PALABRAS PARA UN HIJO
Si logras conservar intacta tu firmeza
cuando todos vacilan y tachan tu entereza.
Si a pesar de esas dudas, mantienes tus creencias
sin que te debiliten extrañas sugerencias.
Si sueñas, sin por ello rendirte ante el sueño.
Si piensas, más de tus pensamientos sigues dueño.
Si triunfos o desastres no menguan tus ardores
y por igual los tratas como dos impostores.
Si hasta el pueblo te acercas sin perder tu virtud.
Si no logran turbar ni amigo ni enemigo,
pero en justa medida pueden contar contigo.
Si entregado a la lucha con nervio y corazón,
aun desfallecido persistes en la acción.
Si alcanzas a llenar el minuto sereno
con sesenta segundos de un esfuerzo supremo...
Lo que existe en el mundo en tus manos tendrás,
¡Y adelante, hijo mido, un hombre serás!
Rudyard Kipling