A más de
200 millones de años luz de nuestra Vía Láctea, la galaxia ESO 137-001
se está 'desgarrando', al perder parte de su contenido estelar por el
camino. La espectacular imagen captada por el telescopio Hubble muestra
cómo se desprenden restos de la galaxia mientras viaja por el corazón
del Cúmulo de Norma, una gran concentración de nebulosas conocida como
Abell 3627.
El
'rastro' que va dejando está formado por filamentos de color azul y
violeta. La imagen resultante de la galaxia 'destripada' ha sido
bautizada por los astrónomos de la Agencia Espacial Europea (ESA) lo
han bautizado como un «crimen cósmico».
«Los
'destellos azules' son grandes trozos de la galaxia ESO 137- 001,
filamentos hechos de estrellas, que son arrancados del cuerpo principal
de esta galaxia según se mueve atraída por el Gran Atractor», explica
Rafael Bachiller, director del Observatorio Astronómico Nacional. El
Gran Atractor, según cuenta Bachiller, es una región del espacio donde
se ha concentrado un gran número de galaxias. A su vez, la fuerza
gravitatoria de todas estas galaxias atrae a otras, en particular a las
del Cúmulo de Norma.
Junto a
Bachiller, el físico español Jose Luis Vázquez y los científicos de la
ESA coinciden en que la causa principal del 'desgarramiento' de esta
nebulosa es la 'presión ram' o también conocida como 'onda de choque'
«La
galaxia pierde material- estrellas jóvenes- al atravesar zonas con gas
intergaláctico caliente», declara el físico Vázquez. Los científicos de
la ESA la definen como «una fuerza de arrastre que siente un objeto
cuando a traviesa un fluido». «Aquí, el fluido en cuestión es el gas
sobrecalentado, que está al acecho en los centros de los cúmulos de
galaxias», apostillan.
Al
observarlo desde la Tierra, el 'Cúmulo de Norma' (el conjunto de
nebulosas que está atravesando ESO 137-001) se encuentra en una
dirección próxima a la del plano de la Vía Láctea. Incluso, se podría
observar con nitidez si no fuera porque el polvo interestelar de
nuestra galaxia actúa como una pantalla que no deja observar claramente
las galaxias que forman parte de Norma. «Pero el Hubble está preparado
para el desafío», destacan desde la ESA.
Los
científicos consideran que este tipo de imágenes no sólo ofrecen una
visión espectacular del Universo, sino que, además, permiten estudiar
los cambios que sufre una galaxia, en este caso ESO 137-001, cuando
viaja por el espacio y atraviesa el corazón de nebulosas.