Seguimos avanzando en la Cuaresma en camino hacia la
Pascua.
En el Ciclo A vivimos los grandes compromisos salvadores,
en torno a los cuales meditamos cada domingo:
1- Vencer la tentación.
2- Ser transfigurados
con Él.
3- Beber el agua (samaritana).
4- Abrirnos a la luz
(ciego).
5- Recibir la vida
(Lázaro).
Dejémonos llevar por la Palabra, meditémosla en nuestro
corazón, y vivamos una Cuaresma santa y provechosa para acercarnos mucho más a
Él.
¡Buenos días!
Fácil y difícil
Si lo consideras
bien, tu vida está llena de desafíos. Con frecuencia las circunstancias te
provocan a dar pasos adelante, a no quedarte sino a subir y progresar. Con esta
visión descubrirás que, incluso las peores tormentas de la vida, te invitan a
cambiar y mejorar. Lee lo que sigue y decídete a afrontar aun lo que se te
presenta difícil.
Fácil es soñar todas las noches. Difícil es
luchar por un sueño. Fácil es tropezar con una piedra. Difícil es levantarte.
Fácil es cometer errores. Difícil es aprender de ellos. Fácil es orar todas las
noches. Difícil es encontrar a Dios en las cosas pequeñas. Fácil es criticar a
los demás. Difícil es mejorar uno mismo. Fácil es pensar en mejorar. Difícil es
poner en acción lo pensado. Fácil es prometerle a alguien algo. Difícil es
cumplir esa promesa.
Aprender de los
errores, encontrar a Dios en las cosas pequeñas, luchar por un sueño, son otros
tantos desafíos a superar la mediocridad y el estancamiento. Que no dramatices
las dificultades, porque normalmente son fantasmas de la imaginación que
racionaliza nuestras cobardías para no salir de la fácil rutina. ¡Ánimo, sé
valiente y confía en el Señor!
Padre Natalio
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un día más
para adorarte y servirte. Hagamos como decía San
Agustín: Señor a Ti solo busco, a Ti solo amo y tuyo
quiero ser. Mi único deseo es conocerte y amarte. (Sol
1,1,). La mies es mucha y pocos son los obreros para
recogerla. Es la Palabra de Dios. Alabado sea Jesucristo.
Amén. Yo dibulgo cada día Pequeñas Semillitas, con el
vehemente deseo de que se propague la Fe, en el Sagrado
Corazón de Jesús y suplico a todos los creyentes y no
creyenes, que pidan al Señor Jesucristo en oración, que no
haya más guerras ni hambre en el Mundo, ni atentados terroristas ni políticos de guante blanco y reine la Paz así como el amor, en
todos los rincones del Orbe. Así sea. Detente, el Sagrado
Corazón de Jesús está conmigo. Casimiro López