Algunas veces encuentras en la
vida una amistad especial: ese alguien que al entrar en tu vida la
cambia por completo. Ese alguien que te hace reír sin cesar; ese alguien
que te hace creer que en el mundo existen realmente cosas buenas. Ese
alguien que te convence de que hay una puerta lista para que tú la
abras. Esa es una amistad eterna. Cuando estás triste y el mundo parece
oscuro y vacío, esa amistad eterna levanta tu ánimo y hace que ese mundo
oscuro y vacío de repente parezca brillante y pleno. Tu amistad eterna te
ayuda en los momentos difíciles, tristes, y de gran confusión. Si te
alejas, tu amistad eterna te sigue. Si pierdes el camino, tu amistad
eterna te guía y te alegra. Tu amistad eterna te lleva de la mano y te
dice que todo va a salir bien. Si tú encuentras tal amistad te sientes
feliz y lleno de gozo porque no tienes nada de qué preocuparte. Tienes una
amistad para toda la vida, ya que una amistad eterna no tiene
fin.
Autor: Pablo
Neruda
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