MORIR ENTRE TUS BRAZOS
Déjame que respire tu aliento mujer,
dame vida con el mientras beso tus labios,
deja que como serpientes en celo,
jueguen nuestras lenguas con placer.
Déjame que mi boca hambrienta,
recorra tu cuerpo desnudo,
que me pierda en las lomas suaves de tus senos,
en la prologada llanura de tu vientre.
Que sacie mi sed, déjame,
en ese manantial que mis caricias,
hacen desde muy dentro de ti,
despertando esa mujer que en ti yace.
Déjame que te sienta morir en mis brazos,
te daré nueva vida con la ternura de mis besos,
con las caricias de mis manos,
hasta que me sientas morir entre tus brazos.