Es fácil reconocer y
diagnosticar el cambio,
pero lo importante es
adecuarse a él.
El ser humano tradicionalmente
reacciona ante el cambio - de hecho,
cualquier ser viviente.
Pero, mientras un árbol se adaptará
aumentando el tamaño de sus raíces,
en búsqueda de agua,
o bien retorciendo sus ramas,
para tomar la energía del sol,
el ser humano trata de huir del
cambio que se le presenta.
Lo que hay que hacer no es ir
contra el cambio o huir de él,
sino tomar poder internamente
y enfrentar el cambio de la mejor
manera posible.
Todo cambio tiene algún tipo
de beneficio escondido tras de sí.
Cuando descubro el beneficio,
no tengo problemas en cambiar