¿Qué pasaría si eliminases de tu vocabulario el
“No puedo”?
Si “No puedo” dejase de ser una opción válida,
te verías forzado areemplazarla por “Lo haré” o bien “No lo haré”.
Piensa en cuánta claridad, confianza y fuerza podrías lograr.
Demasiado a menudo “No puedo”
es usado para escapar de la responsabilidad
inherente a tus propias oportunidades.
Cada vez que dices “No puedo”, a ti mismo o a alguien más,
estás argumentando a favor de tus propias limitaciones.
Al negarte a aceptar tu responsabilidad,
te niegas a la posibilidad de ser efectivo.
“No puedo”, raramente es cierto.
Generalmente significa “Estoy demasiado cómodo como para” o
"No quiero hacer el esfuerzo necesario".
Los obstáculos verdaderamente insuperables son muy pocos.
Sin embargo repitiendo constantemente “No puedo”
te vuelves cada vez menos capaz, en tu mente, de poder concretar algo.
La próxima vez que estés tentado de decir “No puedo”,
detente y pregúntate a ti mismo si es realmente así.
Sé claro, directo y honesto contigo mismo y te encontrarás usando
“No puedo” mucho menos.
Si el deseo está, también está la capacidad de hacerlo realidad.
Puedes hacer cualquier cosa que desees.
Si lo vas a hacer o no, depende de tí.