Si comienzas a sentir fatiga por exceso de
trabajo y por tus responsabilidades,
haz ejercicios de percepción en los que no
analices nada: Sitúate frente a un árbol y
obsérvalo en paz, recorriendo sus ramas,
hojas y flores, sin pensar en nada más.
Disfruta de la belleza de sus
formas naturales.
Míralo con atención tranquila, feliz y
agradecido de contar con él.
Puedes hacer lo mismo con un lago,
un río, las nubes o un ramo de flores.
Mensaje Positivo