NOCHE DE ABRIL
Era noche de Abril.
Recuerdo.
En el corazón de mis oídos
el sol sollozó sangre,
el universo se hizo negro.
Fueron tres palabras,
las que fragmentando mi alma,
paralizaron el tiempo,
tan sólo tres, suficientes
para cerrar mis ojos y no ver los gestos
en las últimas sombras.
Mientras por mis mejilla,
hormigas salina cosquillan
hasta el vértice de los labios,
monstruos solapados
despiertan multitudes oscuras,
demonios, bestias sedientas de sangre.
Era noche de Abril.
Recuerdo.
Tus brazos rodeaban mi cintura,
los míos tu cuello,
al momento un escalofríos
te recorrió tu cuerpo.
Tres palabras tuyas quebraron mi alma...
Mientras bebías de mis labios
con estilete simulado de beso
yo paralice tu pecho.
Era noche de Abril.
Recuerdo.
Sobre las aguas profundas
que acunan los lotos
la falúa flotando
lleva ahora tu cuerpo gélido,
con párpado mudo
y oídos ciegos
acariciado por velos,
mecido en compases
de fluídos eterno.
Yo lo dejé ahí.
Era noche de Abril.
Recuerdo.
(Del Amor y otros afanes)
Autora: Fe Consuelo Martines Conde
Derechos Reservados
Chile
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