¡Te quiero mucho amiga mía!
Esta carta te la escribo porque estando acostada pensé en ti y me levanté de mi cama para escribírtela y enviártela envuelta en todo el cariño que te tengo... Ya la leerás mañana, mientras tanto, aquí te dejo todo mi cariño de amiga, de hermana y te dejo mil bendiciones.
Gracias por tu amistad,
te quiero amiga mía.