¿Por qué debería dar masajes a sus pies antes de acostarse? De hecho, incluso el simple hecho de pensar en recibir un masaje hace que ambos pies se sientan bien y se relajen ¿Cierto? Independientemente de si prefiere una sesión centrada en los hombros y la parte superior de la espalda o un masaje de todo el cuerpo. El masaje tiene numerosos beneficios y efectos terapéuticos, que favorecen su bienestar general y su salud.

Se dice que nuestros pies pueden beneficiarse más de un masaje. En la medicina tradicional china se dice que las terminales nerviosas de los pies están asociadas con varias partes de nuestro cuerpo. Las áreas específicas de los pies pueden conectar y estimular ciertos sistemas y órganos.

No es una gran sorpresa que el masaje sea bueno para la salud de las personas de todas las edades, ¡y también para las mascotas! Al intentar promover un flujo sanguíneo saludable y la relajación, un simple masaje de pies autogestionado durante 10 a 15 minutos todos los días antes de irse a la cama puede proporcionar grandes beneficios para su salud.

Estas investigaciones se centran en los beneficios psicológicos y físicos del masaje en una variedad de edades y condiciones de salud:

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Masajes en pacientes con demencia

Estas personas demostraron una mejora positiva en la relajación, el estado de ánimo y el estado de alerta con el masaje de pies, mucho más que con el tratamiento electivo de la presencia de calma.

Puede ayudar a reducir la ansiedad

Esto es muy útil en pacientes que están por ser sometidos a cirugías y procedimientos médicos. Se ha demostrado que el masaje puede disminuir los niveles de ansiedad después de un par de sesiones de 20 minutos.

En personas diabéticas

El masaje tailandés de pies se dirigió a pacientes diabéticos que estaban tratando con neuropatía periférica. Si bien los resultados se notaron después de la primera sesión completa, después de dos semanas, también mejoró la sensación del pie, el equilibrio y el rango de movimiento.

Efectos de masajes en bebés

Los bebés con enfermedad de reflujo gastroesofágico revelaron una disminución de los síntomas y el estrés del recién nacido, lo que les permitió alcanzar un peso corporal saludable después de que se realizó un masaje durante media hora, dos veces por semana durante aproximadamente un mes y medio.

El masaje chino intenta animar el descanso del cuerpo y relajar la reacción, con los impactos alcanzando su cima después de solo 10 minutos.

Se ha administrado un masaje de puntos de acupresión para aliviar los síntomas y las alergias del estrés, el dolor, las náuseas y las alergias en sujetos sanos.

Un masaje de 15 minutos tuvo la capacidad de mejorar la salud emocional, psicológica y física de las personas que reciben atención geriátrica.

Date un capricho con un simple masaje de pies, solo le tomará unos 10 minutos cada noche antes de irse a la cama.

Paso 1 – Preparar

1. Puede poner sus pies en una tina de agua tibia antes de comenzar, o puede incluir minerales o aceites esenciales, por ejemplo, lavanda, sándalo y aceite de incienso.
2. Asegúrese de que el aceite sea natural, por ejemplo, aceite de oliva, coco o sésamo o una loción de limpieza.
3. Tome asiento en una silla o en una cama y apoye un pie en su regazo, y deje que el otro descanse ante usted.
4. Agregue una pequeña medida de la loción o el aceite para preparar su pie.
5. Sostenga la parte inferior de su pie de manera inamovible con las dos manos. Empiece a fregar el punto más alto del pie con un movimiento firme, mientras que sus pulgares avanzan gradualmente por la parte inferior del pie.
6. Use una mano libre o una palma abierta para tocar suavemente la parte inferior de su pie para aumentar el flujo de sangre.

 Trabajar los dedos del pie

1. Mantenga su pie debajo de la curva con una mano.
2. Use el pulgar y el índice para extender delicadamente los dedos de los pies hacia atrás.
3. Tire delicadamente de cada dedo del pie en un movimiento suave.
   Deslice los dedos entre cada uno de ellos, mueva esta área hacia adelante y hacia atrás, recorriendo la base de cada dedo del pie con el dedo índice y el pulgar cuando lo desee.
4. Deslice delicadamente cada uno de los cinco dedos entre cada uno de los dedos al mismo tiempo.

Aflojar las articulaciones del tobillo

1. Pon el pie derecho sobre tu muslo izquierdo. Use dos manos, gire el pie en la parte inferior de la pierna y frote con delicadeza los dedos sobre el punto más alto del hueso.
2. Maneje el taco del pie con la otra mano y gírelo muy lentamente en la parte inferior de la pierna de 3 a 5 veces hacia todas las direcciones.
3. Paso 5 – Aplicar presión a los arcos
4. Cubra sus pulgares y aplique un peso delicado en la curva, justo debajo del hueso del talón. En ese punto, empuje gradualmente hacia arriba en la profundidad del dedo gordo.
5. Comience de nuevo apretando con suavidad la curva inferior cerca del hueso del talón y luego, poco a poco, abra los pulgares y extienda todo el ancho de la curva. Cubra sus pulgares una vez más, esta vez apretando un poco más alto en la curva.

Termine frotando su pie con movimientos circulares con sus pulgares alrededor de la curva.