MADRE AMADA
MADRE AMADA Madre, en el infinito amor que me profesas, eres amor eterno que de niño me embelesas, eres el amor puro que llena cada instante de la vida, pues desde pequeño nunca me olvidas, siempre me cuidas. Madre, en el sendero de luz que me conduces, eres el ser especial que en mi cuerpo reproduces eres ferviente calor que llenas mi vida y mi alma, en cada pétalo que forma la flor que se entreteje y se empalma. Madre, cuando la aurora se despierte en el exacto horizonte y que la madrugada deje de ser y la mañana la confronte, lucirás perfecta llena de gracia, glamour y ternura, lucirás radiante, llena de amor, de solas hermosura. Madre, eres un ser hecho por Dios para la procreación, eres un ser especial para multiplicar a cada generación, tu magnánimo recuerdo es perpetuo es eterno, conjugando, el sabor, el color y lo sempiterno. AUTOR: EDGAR CASTEL
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