Andando por los caminos de Dios
encóntrome con una doncella en pijama
bien bella por cierto pero con algo de fama
diría que su carácter vale por dos.
¡Y válgame Dios, si lo tenía!
que hasta los burros relincharían
acércome con sigilo y tino
para abrir con mis palabras el camino.
ÉL.
---Buenos días vuestra merced
Hacedme caso a lo que os digo---
Ella con ímpetu arrojó la jarra de vino
y el pan de la bandeja.
ELLA.
¡Cállese!, no quiero una sola queja
se me han quemado las lentejas
estoy exaltada y malhumorada,
---entre usted a mi humilde posada
con sigilo y sin hacer ruido
que tengo al gato dormido---.
Él.
Yo diría que algo más que el gato,
hasta el conejo que tiene por ahí escondido
¿qué no ve que quiero ser su marido?
si vuestra mereced quiere de amor hacemos trato.
ELLA.
Yo lo amo no lo niego, y lo confieso con dolor
aún con mi mal carácter soy dama respetable
jamás me casaría con un viejo verde picaflor
insaciable en el amor y en el matrimonio inestable.
Él.
¿Vuestra merced me está tratando de bandido?
jamás he sido un canalla, si, un poquito atrevido
soy romántico y sensible y un poco decidido
¡Me voy por donde he venido!
Autores: Juan Vicente Rodriguez. (España)
Ma. Gloria Carreón Zapata. (México)