¡¡¡ EL PUENTE QUE TALLÓ EL AGUA !!!
*** Versos de la Rosa ***
Puente de roca dura tallado por las aguas
sirves de sendero al pescador en la costa,
asombras con un arco que formó la marea
encontrando tú calma al sosegar esa furia.
El furioso mar horado el puente en la roca
que cólera tendrían esas aguas soberanas,
para poder traspasar su dura piedra caliza
en el tiempo donde la tempestad bramaba.
Poderosa es la fuerza que rompe esa roca
oscureciendo el tono gris con su negrura,
cuando lo azulino del Océano asoma bello
alegrando esa verde frescura de las algas
Océano soberano con esa fuerza poderosa
engrandeciste este altanero oleaje pujante,
donde sus alevines juegan entre sus algas
entreteniendo esas corrientes de Neptuno.
Que extrañas figuras forman esa naturaleza
asombrando a ese tiempo que sabe esperar,
con la paciente confianza de su brisa calma
deja a los tiburones un banco de pececillos.
Cuando su furia se desata con su roca dura
todo acantilado señorea su pedestal airoso,
desafiando todo Océano que furioso golpea
salpicas esos farallones de blancura salada.
Los vientos en la época empujan corrientes
en donde brota su hierba que mece esa raíz,
que abraza los salvajes golpes con las rocas
que empuja como salpicando sobre la arena.
Dominante por la gallarda elevación rocosa
trincado a unos fuertes cimientos de piedra,
te muestras ese perfilado al poder de la mar
cuando enfurecida surge atacando el puente.
Este magnifico puente pretende dominarme
cuando ha sido por el Mar la causa de nacer,
todo lo material yo lo disuelvo con entereza
mojado metafísicamente por una Mar bravía.
Es su disolución extremada de piedra caliza
con el predominio de esa marea la desbardo,
con los pacientes desgastes con tiempo real
el flujo de la Mar esculpe puentes en la roca.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
21.-de julio año 2020
Comentario de autor:
El Puente que talló el agua, con el paciente empuje de las mareas y las tempestades, dejando escrita sobre la piedra la poderosa fuerza de Neptuno.
Es como la vida misma, que se talla día a día en el alma de los humanos y deja a la vitalidad, la tarea de crear otro humano, para morir después de atravesar el puente.
El Hombre de la Rosa