Como flor de primavera,
eres frágil...
Mas perfumada que un ocaso de verano, rosa.
Cuando las montañas se abrazan yo te doy mi mano
blanca paloma que has llegado a casa,
angelito, enséñame a volar.
Entre las copas verdes de la vida, que se deshojan
alto, mas alto.
Ven conmigo hermana
muéstrame el camino…
Entre las nubes se confunden nuestras risas
y las lágrimas se mezclan con la lluvia
mas salda aún.
Tu rostro...
hermosa canción de amor,
tu mirada hace poesía
y todo lo que escriba
no podrá jamás describir tu alegría.
Porque te quiero escriba
y escribo para que no me dejes sola.