hacer un verso que tuviera
como una fina mariposa rara,
como una mariposa que volara sobre tu vida, y cándida y ligera revolara
sobre tu cuerpo cálido de cálida de palmera
y al fin su vuelo absudo reposara
—tal como en una rosa azul de la pradera—
sobre la linda rosa de tu cara...
toda la fragancia de la Primavera y que
cual una mariposa rara revolara sobre tu vida,
sobre tu cuerpo, sobre tu cara.