¿Mi secreto?
¡Es tan triste!
Estoy perdido de amores por un ser desaparecido,
por un alma liberta, que diez años fue mía, y que se ha ido...
¿Mi secreto?
Te lo diré al oído:
¡Estoy enamorado de una muerta!
¿Comprendes -tú que buscas los visibles transportes,
las reales, las tangibles caricias de la hembra
que se plasma a todos tus deseos invencibles
-ese imposible de los imposibles de adorar a un fantasma?
¡Pues tal mi vida es y tal ha sido y será!
Si por mí sólo ha latido su noble corazón,
hoy mudo y yerto,
¿he de mostrarme desagradecido y olvidarla,
no más porque ha partido y dejarla, no más porque se ha muerto?
Amado Nervo
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