Hubo once sismos desde esta madrugada en Chile y uno de 5.3 grados
en Neuquén
Todos han sido entre Valparaíso y la zona de
El Maule, donde ocurrió el devastador terremoto. Los movimientos
dificultan la búsqueda de desaparecidos. Pronostican además lluvia y
frío. A las 2 de la mañana un sacudón despertó a los neuquinos.
martes, 02 de marzo de 2010
Es difícil conciliar el sueño para los que viven
entre la Séptima y la Quinta Región de Chile. Esta madrugada sintieron
once sismos, el primero a la 1 de la mañana y el último a las 9.15 de la
mañana. Todos los simos fueron de entre 4.6 y 5.3 grados.
El de la 2 fue en la zona de Bio-Bio, cerca de la devastada ciudad de
Concepción, y llegó a 4.8 grados en escala de Ritcher. Luego, durante
toda la noche, hubo más movimientos: uno de 5 grados en la región
Libertador O´Higgins, otro de 5,1 en la costa de Bio-Bio, otro de 5,1 un
poco más tarde en la misma región, otro de 5,5 en Libertador O´Higgins y
más tarde uno de 4,6 en Bio-Bio. A esa altura eran las 4 menos 10 de la
mañana.
Pero los movimientos siguieron: 5.1 grados en Libertador O´Higgins, 4,8
en Bio-Bio, 5.3 en la región de Maule, 5.0 de nuevo en Maule y por
último uno de 5,2 a las 9.15 que sintieron todos los pobladores de
Concepción.
Mientras tanto, Neuquén se sacudió a las 2 de la mañana con un sismo de
5.3 grados cuyo epicentro fue en esa provincia y se sintió hasta en
Bariloche.
Estas réplicas y las posibles lluvias en el centro-sur de Chile podrían
dificultar aún más la entrega de ayuda a las zonas afectadas por el
terremoto de magnitud 8,8 en la escala de Richter que golpeó al país el
sábado último.
"Después de un sismo de la magnitud del que tuvimos días atrás es normal
que se sientan réplicas, porque las placas siguen liberando energía",
dijo el jefe de turno de la Ofincina Nacional de Emergencias (ONEMI),
Osvaldo Malsanti.
Las réplicas se suman al anuncio realizado por la
Dirección Meteorológica de Chile sobre posibles lluvias en la zona
centro-sur de Chile e incluso tormentas eléctricas en zonas
cordilleranas.
.
Malsanti llamó a la calma a la población, que continúa pasando las
noches en la calle para evitar los saqueos, a pesar de la bajada en las
temperaturas.
"Hay que mantener la calma, porque ninguno de estos sismos generaría un
tsunami", añadió.
Cada uno de los movimientos de tierra dificulta aún más el rescate de
las personas enterradas bajo los escombros del edificio de 14 pisos que
colapsó en el centro de Concepción.
Los cuerpos de rescate tuvieron que interrumpir las labores durante la
noche para no poner en riesgo la vida de los voluntarios, según indicó
el capitán de bomberos Juan Carlos Subercaseux.
En tanto, la directora de ONEMI, Carmen Fernández, salió al paso de las
críticas al anunciar durante la madrugada que para hoy está prevista la
entrega de 5.000 viviendas de emergencia en las zonas del Maule y Bio
Bío, principalmente.
"Estamos en una red de distribución que está operando y ya lo masivo en
ayuda empezó al fin a funcionar", indicó.
Mientras llegan los suministros a los afectados, la ciudad de
Concepción, epicentro urbano de uno de los terremotos más fuertes de la
historia de Chile, mantiene el toque de queda luego de fuertes
incidentes y la llegada de tanques militares en la jornada del lunes.