Las causas y los factores de riesgo

 

Aunque los científicos saben que la enfermedad de Alzheimer implica la falla de las células cerebrales, no se conoce el por qué. Sin embargo, han identificado ciertos factores de riesgo que aumentan la probabilidad de que una persona desarrolle el Alzheimer.

La edad

La edad es el factor de más riesgo para la enfermedad de Alzheimer. Una de cada ocho personas mayores de 65 años de edad tiene el Alzheimer y casi el 50 por ciento de las personas mayores de 85 años de edad padecen de la enfermedad.

Historial genético familiar

Otro riesgo es el historial genético de su familia. Los resultados de los estudios científicos indican que aquellas personas que tienen un padre o un hermano con enfermedad de Alzheimer tienen un riesgo dos o tres veces más alto de desarrollar la enfermedad. El riesgo aumenta si más de una persona en la familia tiene la enfermedad.

Los científicos han identificado un gen que aumenta el riesgo del Alzheimer pero no garantiza que el individuo vaya a desarrollar la enfermedad. También han descubierto ciertos tipos de genes poco comunes que casi garantizan el desarrollo de la enfermedad. Estos genes que han sido detectados en solamente unos cientos de familias extendidas en todo el mundo y representan menos de 5 por ciento de los casos de la enfermedad de Alzheimer. Los expertos creen que la mayoría de los casos es debido a una compleja combinación de influencias genéticas y no genéticas.

Otros factores de riesgo

La edad, el historial familiar y la genética son factores de riesgo que no podemos cambiar. Sin embargo, ahora los estudios científicos están dando pistas sobre otros factores de riesgo que podríamos controlar.

Aparentemente hay un fuerte vínculo entre el futuro riesgo de desarrollar el Alzheimer y las lesiones serias en la cabeza o el cerebro. Es importante proteger su cabeza abrochándose el cinturón de seguridad en su automóvil, usando un casco cuando participe en deportes, y tomando medidas en su casa para evitar caídas.

Hay evidencia que relacionan la buena salud al Envejecer y una reducción del riesgo a desarrollar el Alzheimer. Algunas medidas incluyen controlar la presión sanguínea, el peso, y el nivel de colesterol, hacer ejercicio físico y mental; comer una dieta balanceada, y mantenerse activo socialmente.