En su primera cita,
un hombre le pregunta a su
compañera si desea tomar
una copa.
-¡Ay, no! ¿Qué diré en mi
clase de religión y moral?
-responde ella.
Más tarde, él le ofrece un
cigarrillo.
-¡Ni pensarlo!. ¿Que diré
en mi clase de religión y
moral? -insiste ella.
De camino a casa de la
joven, él ve un motel, y
piensa que no perderá nada
preguntándole si le gustaría
detenerse allí.
-Mmm... -responde ella-,
acepto.
-¿Y qué dirás en tu clase de
religión y moral? -pregunta él,
extrañado.
-Lo que siempre les digo: no se
necesita beber o fumar para pasar
un buen rato.