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Mi muy querida Lulu:
Saber que tienes el inmenso
dolor de haber perdido
a tu prima ha sido una
sorpresa para mí y para el resto. Siento
muchísimo que la tristeza
ronde tu vida.
Sé que suena muy trillado el decirte:
"Ya está con Dios",
pero amiga, no hay palabras tan grandes y
son las
únicas que pueden calmar el sufrimiento de una pérdida
como la tuya. Si hay un
bálsamo que cure la herida
es únicamente ése, saber
que ya no sufrirá, que su alma
estará rodeada de luz, de
tranquilidad, de felicidad.
¡Cuántas veces has sido tú
un pilar para refugiar
nuestra tristeza, para que
nos sostenga en ella,
Amiga linda, esa fortaleza
que siempre brindas es la
que ahora te sacará
adelante porque eres una mujer
fuerte, que sabe navegar y
salir adelante ante la
adversidad. Dios mitigará
tu dolor y te
permitirá revivir los más hermosos
recuerdos,
las más bellas palabras,
los dulces recuerdos
borrarán el sabor de
las equivocaciones. Ten fe
en Nuestro Señor y
tus oraciones te sostendrán y te
llevarán a
comprender que este dolor y pérdida para ti era
inevitable para que tu
prima se reuna con Dios.
Ella ahora está feliz,
deja que lo sea aún más
al ver que logras salir
adelante al brotar una sonrisa,
al volver a seguir tus
metas, tus sueños, con
alegría y esperanza.
Mis oraciones estarán
contigo al igual que las de nuestras compañeras
Verás que tu prima sigue
siempre a tu lado porque
así lo sentirás en tu
corazón.
Te quiero muchísimo Lulu, cuídate por favor y
piensa que todas tus amigas
te acompañamos
en tu dolor.
Un beso, un abrazo y todo
mi cariño para ti.
Roxana.
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