Una ingeniosa idea para llamar a pequeños colibríes en EE.UU.
Un colibrí vuela cerca de un pequeño comedor, en el hogar de Chris Caviezel ubicado en Hyak. Cada año, Caviezel compra entre 68 y 90 kilogramos de azúcar, las que utiliza para fabricar néctar que atrae a las pequeñas aves.