Procedimiento
- Rallar el jabón y fundir a baño de María, junto con el agua y el aceite de caléndula. Revolver hasta obtener una pasta homogénea.
- Agregar las semillas de lavanda y el colorante para jabón. Retirar del fuego y añadir la esencia.
- Untar los moldes con la vaselina y verter la preparación. Llevar al freezer por 45 minutos.
- Desmoldar al instante de retirar del freezer y dejar curar durante 2 semanas.
Nota:
La lavanda normaliza la secreción de las glándulas sebáceas. La caléndula cura pieles con erupciones, y juntas son beneficiosas para la piel propensa al acné.
La lavanda tiene propiedades antiespasmódicas, antisépticas, diuréticas, cicatrizantes y analgésicas. Se la puede utilizar en forma de infusión, decocción, tintura, pomada y loción.
Fuente: “Jabones y cosmética”, Karina Lipski y Manuela Gallo, Utilísima Editores.