Antes de que triunfemos sobre una situación difícil, Dios con frecuencia nos hace pasar por un tiempo de preparación espiritual. Eso fue lo que sucedió antes de que israel conquistara canaán. Cuando Josué estaba cerca de Jericó pensando en la batalla que enfrentaría, Dios se le apareció.
La reacción de Josué ante este nuevo encuentro con Dios puede ayudarnos a aprender cómo debemos responder cuando él habla a nuestro corazón por medio de su Palabra y su Espíritu.
Josué se acercó al señor para hablar con él.
Se postró sobre su rostro en humildad y sumisión a su autoridad.
Pidió más instrucciones: "¿Qué dice mi señor a su siervo?" (v. 14).
Obedeció de inmediato. y Josué lo honró porque le temía.
El señor siempre anhela reunirse con nosotros, pero lamentablemente muchas veces estamos demasiado ocupados para hacer el esfuerzo de acercarnos a él. Al descuidar su presencia, nos perdemos la oportunidad de recibir su aliento, fortaleza y dirección en medio de las dificultades.
Nuestra actitud cuando leemos la biblia y oramos, es muy importante. Un espíritu humilde, sumiso y dócil nos permite escuchar a Dios, y la obediencia inmediata a sus instrucciones revela nuestro gran respeto a él.
Si usted está luchando con una dificultad, y se pregunta por qué el señor no ha intervenido, quizás él está esperando que usted tenga un encuentro con él, como Jesús, y se humille en su presencia con dependencia total. Solo entonces estará usted en condiciones de escuchar la voz de Dios y obedecer sus instrucciones.
Dr. Charles F. Stanley
Josué y el varón con la espada desenvainada Josué e:13-15
13 Estando Josué cerca de Jericó, alzó sus ojos y vio un varón que estaba delante de él, el cual tenía una espada desenvainada en su mano. Y Josué, yendo hacia él, le dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos?
14 El respondió: No; mas como Príncipe del ejército de Jehová he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró; y le dijo: ¿Qué dice mi Señor a su siervo?
15 Y el Príncipe del ejército de Jehová respondió a Josué: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás es santo. Y Josué así lo hizo.
Josué descubrió que había un Jefe más poderoso que él, quien estaba listo para guiar al pueblo a la conquista de la tierra prometida "Quita el calzado de tus pies" esta es una señal de humildad y respeto. Sometamonos continuamente nuestra vida a la autoridad de Jesús. Reconozcamos que Él viene como Capitán de Su ejército para conducrinos a la victoria. Él es
Jehová-Nissi, "Él es nuestra bandera", asi como Moisés reconocía a Dios como el autor de la victoria sobre los amalecitas, lo mismo es contra nuestros enemigos! No estamos solos... El Todopoderoso de Israel está siempre con nosotros, aleluya!!
En Su amor y mi amor,
Ministerio Mujeres en Victoria Somos siervas de Dios que trabajamos por la restauración integral del Cuerpo de Cristo y especialmente en la restauración de la mujer en todas las áreas