Escuchando tus palabras,
se adormece la paciencia,
las esperas son muy largas,
la distancia es impotencia,
condicionantes amargas,
sin tu boca, ni tu esencia
Existen tantos motivos,
de pedirte que te quedes,
de los tiempos relativos,
escuchando que me quieres,
de quimicos y de activos,
que motivan nuestros seres.
De mil noches con tu brillo,
de tus manos en las mías,
juntos al mismo estribillo,
en tus tiernas melodías,
del amor firme y sencillo,
con que iluminas mis días.
Razones existen tantas,
para que nunca te vayas,
de los versos que me cantas,
de tu imagen en las playas,
cuando grito que me encantas,
cuando me miras y callas.
No quiero nunca dejarte,
lo mejor seria morir,
descubrir eres mi otra parte,
la que me obliga a vivir,
la que mi cielo comparte,
la razón para existir.
Y si fuera necesario,
recorrería mil montañas,
andes valles y llanuras,
miles de gentes extrañas,
miles de suertes y dudas,
solo por contigo estar.
¿ Pero ? Ya que sabes mis motivos,
las razones que sostengo,
del ¿Porque seguir contigo?
Es mi vida y mi sustento,
¡Dimé! ¿ A ti que ti que te motiva ?
¿Que razón te da el momento?
Así entre versos y razónes,
en motivos y cuestiones,
sé que tu lo entenderás,
tus motivos son los mios,
sin importar nada más,
te pido nunca me dejes,
tu... Solo dime no te vas.