NADA...
Nada me hará volver. Siento que ha sido
un fuego de artificio, una bengala
ardiendo entre las manos: presentido
mezcla de estrella errante y de luz mala.
Ahora es el silencio estremecido
y está la oscuridad que nos iguala.
Te desharé en el viento ya, sin ruido:
ceniza gris, tu imagen que resbala.
Me defiendo de tí, de mí, de todo,
dejándote de amar, éste es el modo.
Nada, Ni soledad exasperada,
ni el rumoroso río de la sangre
me harán volver a ti. Ni sed, ni hambre,
ni la necesidad de amarte, Nada
Julia Prilutzky Farny
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