Ser humilde, no significa que te humilles.
Dar amor, no significa entregar todo
y no recibir nada.
Tampoco des esperando nada a cambio,
pero recuerda que si lo recibes,
es porque a quien amas, también te ama.
No des siempre el primer paso
para solucionar un problema de amor,
permite que te conquisten,
y si eso pasa, no olvides que le interesas.
Ama, pero ve a quien le entregarás tu corazón.
Sueña, pero no con un mundo color de rosa,
porque si tu realidad no es vivir
en un castillo encantado con un príncipe,
cuando despiertes de tu sueño,
lo convertirás en frustración.
Confía, pero no cierres tus ojos.
El amor es dar, es compartir, es conversar,
entregar, respetar, besar, acariciar, soñar,
velar, rezar, confiar;
pero no solo de ti,
también debes de recibirlo.
Y si no es así, no te hagas daño,
tal vez por el momento no sientas que te daña
y que te incomoda,
pero todo tiene un límite y te cansarás de luchar
por tener que ser dos al mismo tiempo.
Y si esto sucede contigo, como sucedió conmigo,
solo recuerda que:
"Valiente no es el que tiene miedo",
"Valiente es el que tiene miedo y lo enfrenta".
Solo recuerda esto
y ponlo en cada situación que te pasa en la vida,
"Todos tenemos lo que merecemos"
Si tu te mereces una vida así, sigue ahí y si no,
se valiente.
A/D