PERDONAME

Perdóname cuando te haga sentir mal
con mi feria de estupideces,
cuando te conteste de mal humor
porque he pasado un mal día,
tú no tienes la culpa de mis problemas.

Absuélveme cuando te lacere
de una forma inconciente
no he sabido ser bien esa persona
que tú has deseado que sea.

Perdóname cuando no te ponga atención
cuando no sea participe de tus locuras,
cuando sea un tonto sin descripción,
cuando quiera solo hablar yo y nada más.

Absuélveme de tantos errores continuos
y de esta indiferencia en los cisnes.

Perdón porque hoy no te he escuchado
y tan solo te he ignorado en tu aurora,
un desliz que fractura nuestra relación
embelezado por los errores ortográficos
sólo trato de quedarme en tus gestos
que consumen mi depresión y angustia.

Perdóname cuando te miento sin razón
y cuando todo lo de mí te lastima mucho,
cuando no entiendo tú por qué y tus quejas,
cuando solo te veo sin mediar palabras…

Perdóname de mis faltas por favor
a pesar de todo eso te agradezco tanto
por darme el privilegio de estar aquí
pidiéndote disculpas por todo mis daños.

Quizás no he sabido interpretar tu dolor
tu fascinación, tus gustos, tu clemencia,
o tal vez solo he lacerado tu corazón,
quizás no he visto tus demandas escritas
de dulzura, de amor, de comprensión.
Perdón por no escuchar tus alaridos
que como agujas penetran el alba.

Absuélveme de este sufrimiento
que congoja también mi voluntad,
hoy tan solo he visto tus indecisiones
y tus reacciones con tus movimientos
buscando en mí una solución.
Sólo perdóname porque soy culpable
de todos los cargos que me impongas.

Perdón por tus lágrimas de brillantes
que de la fuente de tus ojos brotan
para buscar la sensibilidad en mi ser
y aún permanecen en su viaje
sabiendo que todo lo derrumbaste
con tu desdén de flores imaginarias.

Perdóname cuando te lastimo
cuando te hago sentir mal,
perdóname, porque soy culpable
de tanta crueldad que a ti hago,
condéname a seguir sin libertad
vagando en esta fría celda de tu dolor.

Perdóname…

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