Puedes subir montañas,
pero no alcanzar el cielo,
puedes besar mil bocas
y no conocer el amor.
Puedes tener sexo
y no alcanzar el orgasmo
que te haga soñar.
Ven te invito a volar
a encontrar en algún lugar
la felicidad.
Eres el deseo de una estrella fugaz,
eres la mujer especial,
que todo hombre
quisiera tener.
Fuego y ternura a la vez,
espíritu oculto del edén,
enséñame,
amarte hasta el fin,
solo quiero al tiempo,
al viento desafiar.
Puedes conquistar corazones,
con tan solo una sonrisa,
sin desnudar el cuerpo,
tan solo el alma.
Puedes conocer muchos hombres,
oír sus mentiras
y ser parte de su intimidad,
pero no la sinceridad
que te haga ser parte de su verdad.
Autor Alejandro García Hernández