JAMÁS DUDES DE TÍ
Tienes tanto que ofrecer,
tanto que dar y tanto mereces recibir.
No lo dudes jamás...
conócete y conoce todas tus buenas cualidades.
Regocíjate de las fuerzas maravillosas
de mente y cuerpo.
Alégrate de las virtudes que son tuyas
y congratúlate por todas las cosas admirables
que has hecho.
Mantén una actitud positiva...
concéntrate en lo que mayor felicidad te da
y confía en tu persona.
Mantén el ágil ritmo de tu corazón,
la alegría de tus pensamientos
y el bienestar de tu ser.
Janet A. Sullivan
|