Meditación breve
Es asombroso lo mucho que
descubro sobre mí mismo cuando
me tomo el tiempo necesario
para apreciar mi entorno.
Ya sea que esté en el campo o en la
ciudad, la belleza y diversidad de
la creatividad de Dios me rodean y
me llenan de sobrecogimiento y
maravilla. Constantemente
aprendo y crezco en
cualquier ambiente en
que me encuentre.
Así como el roble se yergue alto y
seguro contra el fuerte viento,
así me yergo seguro
en mi fe en Dios.
Mediante mi inclaudicable fe,
sé que puedo superar
cualquier circunstancia
aparentemente negativa.
Sólo Dios puede crear algo tan
perfecto y único como un imponente
roble o tan diminuto y poderoso
como una hormiga. No obstante,
también yo soy una parte
intrincada del mundo de Dios,
pues he sido creada a
Su imagen y semejanza.
Fuente: Catholic.net