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LA ESCUELA DE LA VIDA
Siempre hemos oído decir que la vida es como una escuela, que venimos a aprender unas determinadas lecciones, que la vida te enseña. En base a estas afirmaciones, en algunos momentos, sobre todo cuando nos pasa algo "negativo", nos preguntamos sobre qué s ...erá lo que tendremos que aprender de esas experiencias. En la mayoría de los casos, no sabemos extraer ningún aprendizaje de nuestras vivencias, o la enseñanza que creemos que tenemos que sacar de ellas no es realmente la que se pretendía. Como toda buena escuela que se precie, la escuela de la vida debe seguir un plan de estudios estructurado. Debe contar con unas asignaturas que han de ser las mismas para todos los estudiantes que pasen por la escuela. Y además, si no superamos una materia, tenemos que repetirla hasta que la dominemos completamente. Pero, ¿cuál es el plan de estudios?, ¿cuáles son las asignaturas? Sólo existe una, la asignatura del Amor. Hemos venido aquí a aprender una sola lección, hemos venido para aprender a amar. A amarnos a nosotros mismos, a amar a nuestros amigos, también a nuestros enemigos, al planeta, a nuestros familiares, al Creador, a los animales...es decir, a todo cuanto existe empezando por tí, porque si no sabes amarte a ti mismo, ¿cómo entonces vas a saber dar amor a otros? No podemos dar lo que no tenemos. Cuando te amas a ti y a los demás, todo funciona a la perfección. Cuando existe una falta de amor, todo comienza a torcerse. Las circunstancias en las que nos resulta difícil experimentar el amor, son como presentarse a un examen. Si consigues superar tus emociones negativas y expresar amor, entonces superas la prueba. Si no lo logras, no te preocupes, la vida se encargará de someterte nuevamente a una prueba para que recuperes la asignatura pendiente. Un truco para sacar matrícula de honor es mirar más allá de las apariencias, tratar de ver más allá del mundo físico y enfocar nuestra atención en la realidad del reino espiritual, donde todo es luz. No hay situación que el poder del amor no pueda resolver. Y recuerda que todos venimos a aprender la misma lección. No elegimos el plan de estudios, tan sólo podemos elegir como y cuando estudiar. Mi consejo es que no lo dejes para el último momento, decídete de una vez a aprobar tus exámenes y pasar de curso.
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