Noche enloquecida con una luna de testigo Y... En un mismo cielo dos amores amándose, están bajo las sabanas dos cuerpos enamorados... Unas manos intranquilas vibrando en una sola caricia, dentro de un mismo deseo hay dos bocas comiéndose a besos, y de dos hogueras de pasión arde una sola llama, labios saboreando la miel que se derrama por doquier... Se encuentran dos pieles en un mismo estremecer, perdiéndose así en la locura dos mentes sin razón, enredados en la perdición de un amor sin final, van por un solo camino dos mentes volando sin destino... Miradas escondidas hallándose en el deseo, están así dos almas haciendo un solo sentimiento, fundiéndose dos cuerpos en un solo éxtasis de amor, acelerándose dos corazones entonando una misma canción, haciendo de nosotros dos... Uno solo.