Al romper el día, tras la noche oscura, se va la chiquilla a probar fortuna.
Diecisiete años, y mucha ilusión por ver cosas nuevas y dejar el rincón.
Coge un tren y otro en cada estación. gente que bajan y suben. Cierra sus ojos y sueña.
Este es el tren de la vida que unos cogen y otros dejan, cuando el tren se pone en marcha, cuantos son los que han subido. y cuantos los que bajaban.
Cortos y largos trayectos que la vida les regala, pero al final del viaje, van a la misma parada.
A/d
|