¿Tienes un sueño?
Imagino que la respuesta es... sí.
Todos y todas tenemos sueños y deseos.
De hecho, nuestro mundo y todo lo que nos rodea se creó gracias
a los sueños y deseos de cada uno de nosotros.
Si estás vivo, tienes un sueño.
Aunque pienses que ya ha pasado el tiempo para ti,
que ya no tienes edad o que no te mereces lo que deseas,
créelo: Ahora, es el momento adecuado.
¡Ve hacía tu sueño!
Nunca es tarde por ejemplo, para ser escritor o para ser madre.
J. Saramago o A.R. Quintana son buenas muestras de ello.
No importa que tengas más de sesenta años o más de cincuenta.
Tú eres lo que tus pensamientos crean.
Y ahora mismo, con ellos, estás creando tu futuro.
Los sueños nunca se terminan.
Son una bocanada de aire fresco. Un suspiro tranquilizador.
Una mañana de descanso reparador.
Son parte de tu vida. De nuestra vida.
Aún tienes tiempo de hacer lo que deseas.
Aún tienes tiempo, porque estás vivo. Estás viva.
Si tienes los sueños aparcados dentro de ti, despiértalos.
Son parte de ti mismo, y siguen ahí.
¿Recuerdas lo feliz que te hacía tocar la guitarra todas las tardes?
¿Recuerdas lo bien que te sentaba pintar cuando estabas triste?
¿Recuerdas las esperanzas que tenías en tus grandes sueños?
Sabías y creías que un día seguirían formando parte de tu vida.
Aún creías en ti y en lo que hacías. Aún le hacías caso a tu intuición…
Aún no es tarde para ello. Nunca es tarde.
Abre los oídos de nuevo. Escúchate. Vuelve a sonreír.
Vuelve a motivarte.
Tú eres el guardián de tus propios sueños.
Date una tregua y recupéralos.
D/Autor