LA BUENA VIDA
Una secretaria, un asesor legal y un socio de una gran empresa jurídica se dirigen a almorzar cuando encuentran una antigua lámpara de aceite.
La frotan y aparece un genio en una nube de humo.
Este dijo: -Por lo general concedo sólo tres deseos,
de modo que daré uno a cada uno de ustedes.
-¡A mí primero! -dijo la secretaria-.
Quiero estar en Bahamas, conduciendo una lancha de motor, olvidada del mundo. Enseguida la mujer desapareció.
-¡Sigo yo! -exclamó el asesor legal-.
Quiero estar en Hawai,
relajándome en la playa con mi masajista personal,
un suministro inagotable de piñas coladas y
el amor de mi vida. Y también se esfumó.
-¡Tú eres el próximo! -indicó el genio al socio.
Este último dijo: -Quiero a estos dos en la oficina,
en cuanto termine el almuerzo-.
|