Por lo general evitamos bostezar en público, por temor a que los demás piensen que no dormimos bien o que estamos aburridos con la plática.
Sin embargo, investigadores han descubierto que el bostezo sirve para:
- Aumentar la alerta cerebral
- Conservar el cerebro fresco
- Ayuda a cambiar de una actividad a otra
Todo esto se logra porque el bostezo hace que llegue más sangre al cerebro. Cuando bostezas, los músculos de tu cara se tensan ampliamente y luego se relajan, lo que hace que llegue gran cantidad de sangre rica en oxígeno al córtex prefrontal.
El cortex prefrontal es la parte del cerebro encargada (entre otras cosas) de las "funciones ejecutivas" que te permiten hacer planes, organizarte, tomar decisiones y expresar tu personalidad.
El bostezo también envía sangre para estimular un centro llamado precuneus, que se usa en las actividades motoras y de uso de la memoria.
Provocar un bostezo es fácil, cuando quieras hacerlo, finge que bostezas una o dos veces, y pronto aparecerá el bostezo real. Es muy útil y lo puedes usar para lo siguiente:
- Para estimular un pensamiento más claro. Cuando te estés preparando para un examen o una presentación, bosteza varias veces. Y cuando te encuentres en el salón de clases y te sientas perdido en una pregunta, no dudes en cerrar los ojos y bostezar. Notarás de inmediato más claridad en tus pensamientos y tu memoria.
- Para mejorar tu estado de ánimo y la relación con tu pareja. El bostezo aumenta los niveles de dopamina, un neurotransmisor liberado por el hipotálamo y que se asocia con el placer, la motivación y el deseo de relacionarse socialmente con los demás.
Cuando dos personas bostezan juntas, la tensión entre ambas disminuye, según un estudio psico-social recientemente publicado.
MARIANA