Tras las sombras de la duda,
ya planteadas, ya sombrías,
pueda bien surgir el triunfo,
no el fracaso que temías;
y no es dable a tu ignorancia,
figurarte cuan cercano,
pueda estar el bien que anhelas
y que juzgas tan lejano.
Lucha pues por más que tengas,
en la braga que sufrir,
cuando todo esté peor,
más debemos insistir.
Desconozco su autor