Encuentra a Juan y le pregunta:
- ¿Qué te pasa? pareces enfadado¡
- Nada chico, que iba yo estaba mañana paseando por esta calle, cuando desde un balcón una mujer me ha hecho señas para que subiera a su casa, y yo, creyendo que necesitaba ayuda, he subido y al llegar al piso ella me esperaba en la puerta, semivestida y con insinuaciones tan explícitas, que me he lanzado al ataque sin pensarlo dos veces.
Y cuando se iniciaba el asunto, suena el timbre de la puerta y ella exclama '¡Oh!, mi marido. Deprisa, vístete y ponte a planchar esa ropa, que le diré que te han mandado de la agencia para plancharla'. Y ahí me ves. Mas de cuatro horas planchando ropa, mientras ella y su marido, charlando, bebiendo cerveza, mirándome como lo hacía. Y no te puedes imaginar la cantidad de ropa que había!
- ¿Que no? Esa es la ropa que me tocó lavar ayer a mí. Y sin lavadora, que estaba estropeada.. | |